- La fiera corrupia es el personaje de la Fiera Corrupia se originó en los romances de ciegoiqakie cordel" entre los siglos XVII y XIX.. Entre los diversos temas de sus fábulas, leyendas y crónicas figura el de las fieras.
Una de las fieras mas popularizada por esta Literatura de Cordel, la que más famosa se hizo en el vulgo, y la que ha pasado a la posteridad como arquetipo de fieras quiméricas y fabulosas es la Fiera Corrupia de la que se narraban horribles y fabulosas hazañas, en Navarra se la conoció también con su nombre deformado, que para eso los hispanoparlantes somos mandados a hacer, y a principios de este siglo, allí se le llamaba Fiera Alzupurriaia
Era un terrible y malvado personaje, basado seguramente en la bestia del Apocalipsis, que asesinaba sin piedad a todos los que se cruzaban en su camino. Se le describía como una bestia con cabeza de toro, cuerpo de lagarto cubierto de escamas y enormes uñas como ganchos de romana, aunque la descripción variaba según los autores.
A ella alude varias veces Pío Baroja. En su libro Vitrina Pintoresca (Madrid, 1935, págs. 197-8). Dice así:
...La Fiera Corrupia, en forma de dragón rojo, con siete cabezas, diez cuernos, y unos candeleros con velas en cada cabeza, era evidentemente La Bestia del Apocalipsis... Esta fiera corrupia, descendiente espuria de la Bestia Apocalíptica ha perdido sin duda, de cartel en cartel, el carácter de su origen bíblico.
Se han visto varios romances en los cuales la fiera tenía otros aspectos, véase lo que decía uno de ellos:
La Fiera Malvada. Nueva y curiosa relacion en la que se declara y da cuenta de las horrorosas muertes, estragos y desgracias que ha ejecutado una fiera silvestre titulada Alzupurria el dia 12 de marzo del presente año en la ciudad de Urben, inmediata a Tierra Santa, matando a 153 personas y comiéndose cinco niños llevándose uno para después... y del fin que esta tuvo.
[Joaquín Alipio].
Pío Baroja volvió sobre el personaje, dedicándole un romance en sus Canciones del suburbio:
En Villabruta del Monte, en una caverna oscura que se abre en una oquedad del Pico de Peña Cruda, se ha presentado un engendro, un fantasma, una furia que los más listos del pueblo llaman la "Fiera Corrupia". Es un animal monstruoso, Como un gato lleno de uñas, Con cabeza de serpiente y ojos grandes de lechuza; parte cubierta de pelo y otra cubierta de plumas; de un aspecto tan terrible, que al mismo demonio asusta.
Tan pronto llora en silencio corno se ríe o rebuzna y desgarra a quien se acerca, mientras quejándose aúlla. Tiene en la frente diez cuernos, cara terrible y adusta, y unas velas encendidas entre la frente y la nuca, que dan a su negra cara una expresión tremebunda.
Al parecer, a los chicos les engaña y les adula, y si los pesca en sus garras los sujeta y los manduca. Se ha comido ya seis niños esta fiera disoluta, y, según dicen algunos, hasta los huesos los chupa al parecer, ahora piensa y cínicamente anuncia engullirse algunos más como quien se traga chufas.
No sabemos en la aldea cómo comenzar la lucha contra esta bestia rabiosa que al vecindario importuna, pues si es sobrenatural como varios aseguran, entre ellos Pepito "el Sacris" y la sobrina del cura, ni los tiros ni los palos tendrán eficacia alguna.
Nuestro dignísimo alcalde ha congregado una junta para hacer una campaña contra esta fantasma impura; pero hay que reconocer, y a nadie se nos oculta, que la situación actual empieza a verse confusa, pues hay hombres que pretenden y sostienen y murmuran, por echárselas de sabios y de gente de cultura, que en Villabruta del Monte no existe tal Peña Cruda ni hay en ella, por lo tanto, ni cavernas, ni hendiduras, ni fieras que coman niños, ni monstruos de pelo o pluma, y que todo ello no pasa de ser una broma estúpida, una ilusión de zoquetes, una necedad absurda, una idea de cazurros y una estólida impostura.
Yo apelo al gobernador y reclamo la su ayuda para que nos dé instrucciones sobre tal fiera gatuna, puesto que resulta cierto, y ello está fuera de duda, que el bicho, exista o no exista, nos está haciendo la cusca.
El poeta sevillano Fernando Villalón (1881-1930) dedicó también una interesante composición al personaje, incluida en su obra Romances del 800: LA FIERA CORRUPIA
La fiera corrupia es verde con rayas, en ascuas los ojos, la cola enroscada.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza. Pablito la ha visto pelando la pava y le dijo: ¡MAAU! con voz desusada.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza.
Es verde, muy verde, con algunas rayas, y en las piedras lisas sus uñas clavaba.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza.
Sentada en un canto de piedra labrada, se afila los dientes con una navaja.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza.
- La fiera corrupia es el personaje de la Fiera Corrupia se originó en los romances de ciegoiqakie cordel" entre los siglos XVII y XIX.. Entre los diversos temas de sus fábulas, leyendas y crónicas figura el de las fieras.
Era un terrible y malvado personaje, basado seguramente en la bestia del Apocalipsis, que asesinaba sin piedad a todos los que se cruzaban en su camino. Se le describía como una bestia con cabeza de toro, cuerpo de lagarto cubierto de escamas y enormes uñas como ganchos de romana, aunque la descripción variaba según los autores.
A ella alude varias veces Pío Baroja. En su libro Vitrina Pintoresca (Madrid, 1935, págs. 197-8). Dice así:
...La Fiera Corrupia, en forma de dragón rojo, con siete cabezas, diez cuernos, y unos candeleros con velas en cada cabeza, era evidentemente La Bestia del Apocalipsis... Esta fiera corrupia, descendiente espuria de la Bestia Apocalíptica ha perdido sin duda, de cartel en cartel, el carácter de su origen bíblico.
Se han visto varios romances en los cuales la fiera tenía otros aspectos, véase lo que decía uno de ellos:
La Fiera Malvada. Nueva y curiosa relacion en la que se declara y da cuenta de las horrorosas muertes, estragos y desgracias que ha ejecutado una fiera silvestre titulada Alzupurria el dia 12 de marzo del presente año en la ciudad de Urben, inmediata a Tierra Santa, matando a 153 personas y comiéndose cinco niños llevándose uno para después... y del fin que esta tuvo.
[Joaquín Alipio].
Pío Baroja volvió sobre el personaje, dedicándole un romance en sus Canciones del suburbio:
En Villabruta del Monte, en una caverna oscura que se abre en una oquedad del Pico de Peña Cruda, se ha presentado un engendro, un fantasma, una furia que los más listos del pueblo llaman la "Fiera Corrupia". Es un animal monstruoso, Como un gato lleno de uñas, Con cabeza de serpiente y ojos grandes de lechuza; parte cubierta de pelo y otra cubierta de plumas; de un aspecto tan terrible, que al mismo demonio asusta.
Tan pronto llora en silencio corno se ríe o rebuzna y desgarra a quien se acerca, mientras quejándose aúlla. Tiene en la frente diez cuernos, cara terrible y adusta, y unas velas encendidas entre la frente y la nuca, que dan a su negra cara una expresión tremebunda.
Al parecer, a los chicos les engaña y les adula, y si los pesca en sus garras los sujeta y los manduca. Se ha comido ya seis niños esta fiera disoluta, y, según dicen algunos, hasta los huesos los chupa al parecer, ahora piensa y cínicamente anuncia engullirse algunos más como quien se traga chufas.
No sabemos en la aldea cómo comenzar la lucha contra esta bestia rabiosa que al vecindario importuna, pues si es sobrenatural como varios aseguran, entre ellos Pepito "el Sacris" y la sobrina del cura, ni los tiros ni los palos tendrán eficacia alguna.
Nuestro dignísimo alcalde ha congregado una junta para hacer una campaña contra esta fantasma impura; pero hay que reconocer, y a nadie se nos oculta, que la situación actual empieza a verse confusa, pues hay hombres que pretenden y sostienen y murmuran, por echárselas de sabios y de gente de cultura, que en Villabruta del Monte no existe tal Peña Cruda ni hay en ella, por lo tanto, ni cavernas, ni hendiduras, ni fieras que coman niños, ni monstruos de pelo o pluma, y que todo ello no pasa de ser una broma estúpida, una ilusión de zoquetes, una necedad absurda, una idea de cazurros y una estólida impostura.
Yo apelo al gobernador y reclamo la su ayuda para que nos dé instrucciones sobre tal fiera gatuna, puesto que resulta cierto, y ello está fuera de duda, que el bicho, exista o no exista, nos está haciendo la cusca.
El poeta sevillano Fernando Villalón (1881-1930) dedicó también una interesante composición al personaje, incluida en su obra Romances del 800: LA FIERA CORRUPIA
La fiera corrupia es verde con rayas, en ascuas los ojos, la cola enroscada.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza. Pablito la ha visto pelando la pava y le dijo: ¡MAAU! con voz desusada.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza.
Es verde, muy verde, con algunas rayas, y en las piedras lisas sus uñas clavaba.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza.
Sentada en un canto de piedra labrada, se afila los dientes con una navaja.
Corre, corre, corre, corre, que te alcanza.