La
mitología griega se ha inspirado en muchos de los significados universales del amor que aún podemos ver hoy muy presentes en nuestras relaciones. En concreto, existen algunos mitos muy relevantes que nos
ayudan a comprender aspectos irracionales ligados al puro concepto del amor.
Dentro de estas historias encontramos personajes que representan
distintas facetas del amor y de las principales emociones humanas que a
éste se asocian. Hemos seleccionado algunas de ellas para que podáis
entender mejor a qué nos referimos.
De entre todas las historias mitológicas que tienen como tema central
las diferentes caras del amor, destacan aquellas en las que aparecen
parejas formadas por individuos pertenecientes a distintas esferas en
las que se estructuraba la cosmogonía griega: dioses, divinidades
menores, semidioses como Hércules o criaturas mitad humanas mitad animal
como la gorgona Medusa. Todos conocemos la historia de
Perseo y su lucha contra el monstruo marino Ceto por el amor de Andrómeda, pero hay muchas más con las que poder identificarnos. Algunas de las más importantes son las siguientes:
Las ninfas como representación del amor inalcanzable
La lucha por el amor imposible, es decir, el
enamorarnos de alguien que no nos corresponde ya sea por decisión propria o por imposición externa,
tiene su representación en el mito de Apolo y Dafne. Apolo, tras una
trifulca con cupido -dios del deseo amoroso- fue maldecido por este que
le lanzó una flecha de amor para que se enamorara de la ninfa Dafne, con
una maldición sobre ese mismo amor. De tal manera que cada vez que
Apolo se acercaba a ella, ésta se convertía en un árbol de laurel,
imposibilitando de esta manera la posibilidad de unión entre los
amantes. Apolo, víctima de un amor imposible, pasó la eternidad regando
este árbol con sus propias lágrimas. De este mito, también proviene la
razón por la que los romanos colocaban una corona de laurel como signo
de victoria. No rendirse jamás por grande que sea al obstáculo es el
principal mensaje que nos transmite.
El amor homosexual en la mitología griega
Uno de los mitos griegos que habla sobre la pureza del amor homosexual
es
el de Aquiles y Patroclo. Este héroe -que fue bañado en la laguna
estigia por su madre, la diosa Tetis, haciéndose así inmortal- había
tenido infinidad de historias amorosas con mujeres que lo veneraban,
pero la historia cuenta que
solo alcanzó su corazón el joven Patroclo
que además de su discípulo era de su propia familia. La historia de
amor que vivieron hizo a Aquiles sentir debilidad humana y hacerlo
vulnerable durante el asedio a la ciudad de Troya en el que morirá
víctima de la fatal herida de flecha en el talón, único punto de su cuerpo que no fue sumergido en la laguna estigia y, por lo tanto, mortal.
La manzana de la discordia y la lucha por el amor
Asunto menor que puede llevar a un gran enfrentamiento, así podríamos relacionar la maldición de la manzana dorada y el asedio de Troya. El
juicio de Paris,
decidió otorgar la manzana de oro (que debía ser “para la más bella”) a
la diosa Afrodita, que a su vez le había prometido en cambio de su
elección, el amor de la mujer más bella del mundo: Helena. Una mortal
casada con el rey Menelao. Paris rapta a Helena y la lleva a Troya,
Menelao, por venganza, desencadenará la guerra.
Llegar al corazón de una mujer a través de la ternura
Si hoy se considera que la mejor forma para llegar al corazón de una
mujer es despertando su ternura, el primero en utilizar esta táctica
para cautivar a su amada fué
Zeus que conquistó a su segunda esposa y hermana Hera convirtiéndose en colibrí y yendo hacia su ventana para que esta lo cuidara y se enamorará de él.
Los mitos y la realidad
Debemos considerar los mitos como lo que son:
historias que explican sentimientos y conceptos complicados sobre los que no existe una única respuesta unívoca o racional
No hay comentarios:
Publicar un comentario