María Lionza se ha convertido en una deidad que ha traspasado las fronteras de Venezuela, para convertirse en una referencia de culto religioso en otros países como República Dominicana, Puerto Rico y Colombia.
El origen de María Lionza
María Lionza es representada comúnmente como una diosa o deidad, ella es el centro del llamado Espiritismo Marialioncero, en el cual convergen los ritos y creencias indígenas, católicas y africanas, entre otras culturas.
Esta diosa indígena tiene su origen en Serranía de Sorte en el estado Yaracuy, Venezuela. Quienes son devotos, aseguran que María Lionza cumple cualquier tipo de petición, sea esta material o emocional.
María Lionza fue representada por el artista Alejandro Colina como una mujer desnuda y musculosa, que recorre las montañas encima de una danta, la cual a su vez aplasta con sus patas a unas serpientes que representan la envidia. Por otro lado, María Lionza sostiene sobre sus manos un hueso de pelvis femenina, en representación de la fertilidad.
Hay más de 25 relatos sobre el origen de María Lionza, son muchos los estudiosos que han tratado de descifrar si la mujer que originó el mito realmente existió. Algunos opinan que se trató de una hermosa india venezolana, otros aseguran que era hija de una pareja de españoles y una última versión indica que fue una mujer española proveniente de las Islas Canarias.
Versiones más comunes de la leyenda
1. Cuenta la leyenda que un cacique Indio tuvo una hermosa hija de ojos verdes. Como los ojos claros eran considerados un mal augurio, el cacique decidió llevarla al lago para que la anaconda que habitaba en el mismo la devorara. Al parecer, la anaconda la lanzó fuera del lago y María Lionza se convirtió en una Diosa.
2. Antes de la conquista de los españoles, la población de Yaracuy recibió una premonición en la cual les indicaban que nacería una hermosa niña de ojos verdes, el color de sus ojos era considerado como una mala señal de penurias que estaban a punto de venir. Tiempo después nace la niña de las premoniciones, la cual estaba destina a ser sacrificada en el lago. Sin embargo, su padre la salvó llevándosela a un lugar secreto en donde era custodiada constantemente por guardias. Al pasar los años, la niña se convirtió en una hermosa mujer y un buen día logró escapar y ver su reflejo en el agua, desde ese momento tomó la forma de una anaconda y su cuerpo creció tanto que explotó, quedando su cabeza en la región de Tacarigua y su cola en Sorte.
3. Para el historiador Bruno Manara, María Lionza era una mujer española cuyo verdadero nombre era María del Marqués. Esta mujer salió de España con destino a Venezuela en los años 1800, pero una poderosa tormenta hizo que el barco naufragara, así fue como su cuerpo muy mal herido llegó hasta las costas venezolanas en donde fue rescatada por los indios. Fue llevada a la zona de Chivacoa y allí les enseño a los indios algunas destrezas, con lo cual más tarde se convertiría en la reina de la tribu y de las montañas.
Peregrinación
Los devotos de María Lionza suelen llevarle flores y todo tipo de ofrenda, tanto a la escultura que se encuentra en Caracas, como a la montaña Sorte en el estado Yaracuy. El día de la raza (12 de Octubre), así como también la semana santa, son los días predilectos por los seguidores de esta deidad para acudir a ella en busca de favores.
Los rituales hechos por las personas van desde las tradicionales flores, velas, inciensos, baños en el pozo para purificaciones y despojos, hasta médiums que invocan algunos espíritus y son poseídos en plena montaña.
La historia de María Lionza se ha convertido en una de las más fascinantes del folklore venezolano, no solamente por su carga simbólica y cultural, sino también por haberse transformado en un culto religioso que ha traspasado la frontera de un país para convertirse en una Diosa de América Latina.
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